Jaion Antxeta irratian
Un show siempre es un trance en el ke te conviertes en un canal y no se sabe bien què entra por ti y sale por ti, desparramando su presencia entre la gente ke te regala su presencia y atención. Un trance x el ke me asalvajo, me subo, me pierdo, me diluyo, me escapo. Me entrego en letras y letras y mas letras. Sin conciencia. Cuando además el show es en un camión ke te lleva, literalmente y físicamente en un trance real por calles, el estado mental que se alcanza, al menos yo, se multiplica parriba y Pa fuera y Pa dentro. Pierdo el sentio! Ayer fue en Irun, mi cuarto Camión! Un cacho escenario ke me llevo, me resguardo de la lluvia. Y la ciudad paso ante mis ojos, al otro lado del micro, pero yo solo veía gente, x la calle, en los balcones, marquesinas, tiendas, aceras. Gente mirando, respondiendo a mis saludos. Sobre todo la Maravillosa Gente de LaCaxita, encantadas del paseo x esa ciudad ke yo no veía, porque solo tenía ojos para la gente. Fue mas tarde, cuando volvimos con los bolsos a por el coche ke la ví, a la ciudad. No parecía la misma ke había recorrido en el camión. Pisando sus aceras, me pareció otra. Mas elegante. Mas propia. Íbamos cuatro mujeres agarradas del brazo , de Giza Harresia. Y las gentes de la ciudad nos miraban. Con mi traje galáctico y una chistera de MC, los hombres se colgaban con las manos de mis ojos, como suicidas arrepentidos, y las mujeres de bien, me ignoraban como si ya lo hubieran visto todo en este mundo, ke sabemos kien guarda la moral en este pueblo. Las aceras se casaban con los árboles, y a mi me parecía ke había visto estas calles en una película de Hollywood, muchas veces. Al fondo, en el monte, la ermita de San Marcial nos recordaba ke esto es Europa, ke hablamos de un pueblo de pastores. Pero a mi, ayer paseando, me pareció ke Irun era nuestro New York. Luego llegamos al coche, en lo viejo. Y me senté a sentir el lugar antes de salir. En el repecho ke ofrece la antigua Peluquería Cesar. Respire la noche, intente traspasar el tiempo del espacio, imaginar esa calle hace 20, 30 años. Y entonces pensé ke si Irun es nuestro New York, Mosku debe ser el Bronx. Donde nació nuestro hiphop, creo. Y así nos volvimos, a Iruña Detroit. Gracias LaKaxita. Larga Vida! Gracias Irun. Respect!
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Un show siempre es un trance en el ke te conviertes en un canal y no se sabe bien què entra por ti y sale por ti, desparramando su presencia entre la gente ke te regala su presencia y atención. Un trance x el ke me asalvajo, me subo, me pierdo, me diluyo, me escapo. Me entrego en letras y letras y mas letras. Sin conciencia. Cuando además el show es en un camión ke te lleva, literalmente y físicamente en un trance real por calles, el estado mental que se alcanza, al menos yo, se multiplica parriba y Pa fuera y Pa dentro. Pierdo el sentio! Ayer fue en Irun, mi cuarto Camión! Un cacho escenario ke me llevo, me resguardo de la lluvia. Y la ciudad paso ante mis ojos, al otro lado del micro, pero yo solo veía gente, x la calle, en los balcones, marquesinas, tiendas, aceras. Gente mirando, respondiendo a mis saludos. Sobre todo la Maravillosa Gente de LaCaxita, encantadas del paseo x esa ciudad ke yo no veía, porque solo tenía ojos para la gente. Fue mas tarde, cuando volvimos con los bolsos a por el coche ke la ví, a la ciudad. No parecía la misma ke había recorrido en el camión. Pisando sus aceras, me pareció otra. Mas elegante. Mas propia. Íbamos cuatro mujeres agarradas del brazo , de Giza Harresia. Y las gentes de la ciudad nos miraban. Con mi traje galáctico y una chistera de MC, los hombres se colgaban con las manos de mis ojos, como suicidas arrepentidos, y las mujeres de bien, me ignoraban como si ya lo hubieran visto todo en este mundo, ke sabemos kien guarda la moral en este pueblo. Las aceras se casaban con los árboles, y a mi me parecía ke había visto estas calles en una película de Hollywood, muchas veces. Al fondo, en el monte, la ermita de San Marcial nos recordaba ke esto es Europa, ke hablamos de un pueblo de pastores. Pero a mi, ayer paseando, me pareció ke Irun era nuestro New York. Luego llegamos al coche, en lo viejo. Y me senté a sentir el lugar antes de salir. En el repecho ke ofrece la antigua Peluquería Cesar. Respire la noche, intente traspasar el tiempo del espacio, imaginar esa calle hace 20, 30 años. Y entonces pensé ke si Irun es nuestro New York, Mosku debe ser el Bronx. Donde nació nuestro hiphop, creo. Y así nos volvimos, a Iruña Detroit. Gracias LaKaxita. Larga Vida! Gracias Irun. Respect!
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